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¿Cómo puede dañar la diabetes a nuestro oído?
La diabetes puede afectar a nuestro oído de varias maneras. Cuando el nivel de azúcar sube, puede haber una descomposición de los nervios en los oídos, el mismo tipo de daño que provoca hormigueo y otros síntomas en las puntas de los dedos de las manos y de los pies. “Lo que pasa es que los vasos sanguíneos de los oídos son muy pequeños, así que, cuando la glucosa en sangre es alta, la sangre que corre por esas venas es como sirope”, explica Joanne Rinker, del North Carolina Diabetes Prevention and Control Branch, en la revista Diabetic Living.
Por otro lado, nuestros mecanismos auditivos se apoyan fuertemente en unas células especializadas, llamadas células ciliadas, que pueden ser muy frágiles y sensibles a cambios en su entorno, como el que produce un nivel de glucosa en sangre elevado.
Para evitar esos problemas, el gran consejo es mantener un buen control, lo que exige que tomemos la medicación que se nos ha prescrito, que comamos una dieta saludable, y que hagamos ejercicio.
A pesar de que la sordera súbita no es reversible, unos auxiliares pueden ser de enorme ayuda.
Por: Lic. Ana Laura Loyola de la Luz, Dirección Audiología de Comaudi
CED. PROFESIONAL 8374468
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